La mejor casa del año 2014

Tomas Krögue. Este arquitecto alemán se puso manos a la obra para reformar este lugar construido en 1897 y que originalmente fue el espacio que la cooperativa agrícola local empleaba como almacén.

Situada al noroeste de Berlín, en Uckermark, esta casa ha competido frente a otros 350 diseños europeos, pero se ha llevado el premio a la mejor casa del año 2014 porque, aunque parece muy sencilla, el jurado ha valorado la elegancia y la complejidad con la que se han trabajado los materiales empleados.

La reforma llevada a cabo en este espacio ha sido tanto interior como exterior, donde se ha cubierto la viviendo con metal currugado verde y madera, para adaptar la construcción al paisaje de colinas y laderas con la que convive. Además, se han empleado los laterales de la fachada para abrir grandes ventanales y aprovechar la luz natural del espacio.

En cuanto al interior, el suelo de la vivienda es todo de cemento pulido, los techos han sido reformados para que se vean las vigas de madera y a la vez combinarlas con madera contrachapada en negro y las paredes de la habitación son de madera natural de pino, lo que provee al espacio de un aire rústico. la cocina, el salón y el baño siguen la misma inspiración que la estancia principal. Elementos que contrastan y combinan a la perfección, manteniendo así parte de la esencia de la casa original.

Tenemos que admitir que a nosotros nos gusta el resultado.

Eso sí, siempre habrá gustos para todo y algunos estarán más o menos de acuerdo, pero no podemos negar que la vivienda de Tomas Krögue es un resultado visualmente impecable, en el que se han aprovechado elementos antiguos combinados con nuevos materiales que le dan personalidad al espacio.

Seguiremos trabajando, y quién sabe, igual el año que viene nos toca el premio 😉